Celebrando el 40 aniversario de Superman the movie

Por "el film" conocí verdaderamente a Superman. En realidad en principio, por la impactante campaña de prensa. En el verano de 1978 La Mujer Maravilla ya era un suceso televisivo. Por una nota a Lynda Carter supe de la existencia de ese personaje de capa roja y S en el pecho (La nota de la revista Gente, "Superman con polleras" que todavía conservo).

En mis manos en ese año aparecieron algunas Novaros (y el personaje comenzó a cautivarme, con los dibujos de Curt Swan y de Wayne Boring en las historias clásicas). Pero terminó de enamorarme al verlo majestuoso surcando la pantalla aquel verano de 1979. A mis ocho años creía que el hombre podía volar. Cómo inquieto que era, ya en ese momento había descubierto (por las fotos en algunas publicaciones) que la versión estrenada en Argentina tenía muchos cortes (por ejemplo el consejo de Krypton, parte de Smallville). Creo que la ví tres veces en el cine, y me compraron la figura de Mego (que aún conservo) (mientras esperaba el milagro que me comprasen la de Wonder Woman cosa que nunca ocurrió). A partir de allí comencé a armar un albúm de recortes de diarios y revistas (que continué hasta 1986 y aún conservo), y a coleccionar todo lo que podía tener a mi alcance del Supes.

Mi primera capa ese verano fue el delantal de cocina de mi abuela. Posteriormente me pudieron comprar el kit de Plastirama. A raíz del suceso de la película, Canal 13 de BsAs repone al mediodía Las aventuras de Superman con George Reeves. Así tuve de pronto dos Supermanes de "carne y hueso" que revolucionaban los sueños de mi niñez (todavía recuerdo las discusiones en el colegio sobre si Christopher era pariente o no de George, nada importaba el detalle de la "s" en el apellido.) Los juegos de ese verano (y de los años posteriores) eran con la capa y tarareando a viva voz la marcha triunfal de John Williams. Superman me cautivaba por dos razones: Krypton (desde Star Wars y Flash Gordon la SciFi ha sido pilar en mi vida) y el Daily Planet (siempre tuve fascinación por el periodismo, hasta ejercerlo profesionalmente).

Recuerdo que la película estuvo mucho tiempo en cartel, y ese invierno de 1979 volví a verla. Mientras llegaban a estas costas las revistas de Vértice: Colosos del Comic (en dónde podía leer los nombres originales que en las Novaro eran brutalmente traducidos). Y mientras tanto, esperábamos con ansias la promesa de Superman II (pero eso es otra historia.) FELIZ CUMPLEAÑOS SUPERMAN!! Gracias por darnos esperanza en la vida y en los sueños.

Ese fue siempre el valor fundamental del personaje. (esta semana continuaré con posteos alusivos!)